Marlon Brando no sería el mismo sin este icono de chupa de cuero, camiseta y maldad ambigua y algo blanda. La moto es una Triumph y el productor Stanley Kramer, no digo más. Muchos ponen a James Dean en el papel de Brando. Rebelde sin causa tiene la culpa. Los maravillosos años 50 estadounidenses fabricaban jóvenes malotes. Que iban en moto.
martes, 7 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
CINEMOTÓGRAFO 131. Long Way Home
Llegan las vacaciones y, con ellas, un clásico Cinemotográfico: El Mundo en Moto. Hablamos de la cuarta temporada de la serie documental de...
-
Faltaba en este blog una película española que marcó una época, ganadora de Goyas, candidata a Oscar y Bafta, con el inconfundible estilo...
-
Llegan las vacaciones y, con ellas, un clásico Cinemotográfico: El Mundo en Moto. Hablamos de la cuarta temporada de la serie documental de...
-
Frente al tópico de la moto americana y japonesa, está el de Francia e Italia. Ratatouille no podía ser una excepción. Siempre es de agradec...
No hay comentarios:
Publicar un comentario